UN NUEVO TRATO VERDE SIGNIFICA UN NUEVO TRATO LABORAL

¿Cómo parece un momento de “todas las manos” para DSA? Quizás así, a juzgar por comunicaciones recientes por toda la organización apuntando hacia la primera mayor campaña de 2021. El siguiente material, que viene del sitio web de DSA, cuenta una historia que es tanto excitante como histórica.

La administración nueva de Biden hace grandes compromisos hacia la crisis climática, pero la clase obrera necesita más que una restauración del status quo de la era de Obama y donaciones financieras masivas a las corporaciones de capitalismo “verde.”

Necesitamos un Nuevo Trato Verde que se expanda masivamente el sector público y garantice buenos puestos de trabajo para todos los trabajadores.

El primer paso es asegurar que las promesas de la campaña de
Biden de apoyar a los trabajadores se hagan realidad. El Trato PRO, que se aprobó en la Cámara, pero estancó en el Senado, sería la refundición de ley laboral pro-sindicato de labor más significante desde la Ley Wagner de 1935. Conduciría casi sin duda a un gran renacimiento de la sindicalización y el poder de la clase obrera.
La Ley PRO (Proteger el Derecho de Organizar) tiene varias provisiones claves. Impondría sanciones económicas a los negocios que violen los derechos de obreros, eliminaría las prohibiciones contra las huelgas de solidaridad, e ilegalizaría las reuniones de audiencia cautiva en las elecciones sindicales impugnadas. Quizás más significativamente, prohibiría federalmente las leyes así llamadas derecho-al-trabajo y lucharía contra la explotación de “gig-economía” ajustando los estándares sobre la clasificación de contratistas independientes. Es una buena ley. DSA la apoya, y durante la campaña, también lo hizo Joe Biden.

En marzo 2009 exvicepresidente Biden dio un discurso sorprendentemente bueno en la conferencia anual de AFL-CIO en apoyo de la Ley de Libre Elección (EFCA). EFCA fue una de las promesas claves de la campaña de Barack Obama. Al permitir a los sindicatos de formar vía “Card Check” en vez de forzar elecciones secretas de NLRB, este proyecto de ley habría hecho más fácil organizar para los obreros. “Todo esto va a ser muy difícil,” dijo Biden, “y una de las cosas más difíciles será reinstituir esa negociación básica” entre empresa y obreros: que la productividad más alta significa salarios más altos. “Y creo que la manera de hacerlo es la Ley de Libre Elección.” Sin embargo, como muchas de las promesas de la administración de Obama, se evaporó ante la oposición masiva por las fuerzas de la capital.

¿Tiene la PRO una mejor posibilidad de éxito que tuvo la EFCA? Aprendimos nuestra lección de la debacle de la EFCA. Los Democráticos como Biden no van a poner más prioridad sobre leyes mejores de labor sí no los forzamos, y ahora es el momento de poner más presión. Es por esto que la Comisión Laboral del DSA y la Campaña del Trato Nuevo Verde de DSA están poniendo más presión durante los Primeros 100 Días de la administración nueva para aprobar la Ley PRO, que fortalecería los sindicatos y el poder de la clase obrera para organizar en el trabajo, ayudando a construir el poder laboral tan fuerte como debe ser en los meses y años que vienen para ganar una transición justa a una economía verde para todas las comunidades. El Trato Nuevo original fue ganado a través de la organización sindical militante. Reconstruir esta capacidad es crucial al trabajo de DSA para un Trato Nuevo Verde radical.
La aprobación del Trato PRO cambiará mucho en el mundo de labor, y DSA no se quedará jamás al margen.

Traducción al español de Donna Vivian Landon-Jiménez.